miércoles, 27 de enero de 2010

nuevo comienzo





hola chicos y chicas!
siento no haver publicado desde hace tiempo pero os recompensare colgando mi ultimo trabajo de escultura para que opineis sobre el.
Bueno por si no lo sabiais estoy estudiando bellas artes en murcia. ^^

El trabajo consta de dos partes, primero un comic y despues un relato corto.
Aqui os lo dejo, disfrutarlo y ya me decis que os ha parecido.
























Nuevo Comienzo




Al día siguiente Dan se propuso ir a investigar al palacio más importante de la ciudad, de la noble familia Stebenson. Lo primero que haría seria colarse en la finca y después buscaría información, costase lo que le costase, pues él aseguraba que aquellos fastidiosos nobles escondían datos de relevante importancia para él.
La familia Stebenson era una de las más ricas de la ciudad y, su opulencia solo era superada por su estupidez. Frente a la casa Dan empezó a inspeccionar las entradas y se decidió por la de servicio.
_deben tener, al menos cincuenta sirvientes... _pensó Dan _ seguro que hay alguno dispuesto a ayudarme.
Pero lo que más le preocupaba ahora a Daniel era la excusa que daría si le encontraban allí.
_ Lo mejor será que me haga pasar por un jornalero dispuesto a arreglar cualquier desperfecto por unos reales_ pensó seriamente Dan.
Tubo mucha suerte ya que al entrar nadie le estaba esperando con preguntas sobre lo que hacia allí, sin embargo decidió guardarse su excusa por si le servia mas adelante. Ando a hurtadillas por la gran casa, evitando cualquier ruido y buscando el estudio de Mr.Stebenson. Tras pasarse un buen rato inspeccionando habitaciones y salas de estar creyó dar por fin con el dichoso estudio.
La habitación no era muy grande, solo constaba de unas pocas estanterías, un escritorio muy elaborado en madera de cedro y una gran butaca. Daniel busco y busco pero no pareció encontrar nada fuera de lugar
_ Debe guardar los documentos en los cajones con llave del escritorio_ dijo Dan concentrado a todo ruido_ ya que no era normal que no hubiera nadie en la casa a esas horas de la mañana.
De pronto se escucho un ruido. Alguien se acercaba.
_Si querida, oh, por supuesto que podemos celebrar un gran baile aquí..... ahora vuelvo, debo consultar algo.
¡Que hago¡ _ pensaba Dan casi enloquecido. no obstante conservo la suficiente entereza como para esconderse dejado del escritorio, que, gracias a dios era grande.
Mr.Stebenson entró de pronto y cogió un libro de la estantería. Parecía un libro normal pero en cuanto lo abrió Dan comprobó que no lo era.
_ ¡De modo que ahí es donde esconde su señoría las cartas¡_ pensó Dan contentísimo de su hallazgo.
El señor de la casa dejo una carta en el libro, lo coloco como estaba y salió fuera a atender a una de sus invitadas a la que había prometido dar un baile pronto.
Cuando Daniel se sintió lo suficiente seguro para salir de su escondite fue corriendo a por el libro que, apenas unos minutos antes, había estado en las manos del señor Stebenson. Lo abrió cuidadosamente y vio que dentro solo había tres cartas. Decidido a no pasar allí ni un minuto mas se guardo el libro en el bolsillo, puso uno en su lugar y salió de la habitación, aliviado por haber salido ileso por el momento. Pero su suerte dio un giro radical ya que al salir se encontró de frente con una señorita con la curiosidad en la cara.
_ ¿Quién es usted? _ dijo ella, curiosa.
_ Lo siento señorita pero tengo prisa, si me disculpa. Pero ella no se movió, y no se movería sin una explicación.
Bien, solo soy un jornalero arreglando desperfectos respondió Daniel.
_ bueno... tendré que avisar al señor Stebenson par saber si esta información es cierta o no_ dijo la dama con perspicacia, ya que sabia perfectamente que el hombre que tenia delante le estaba mintiendo _ señor Steben... _ empezó a decir ella, pero antes de que acabara Dan ya le había tapado la boca para que callase.
_ malditas señoritas de la nobleza, siempre complicándome la vida, y si he venido aquí a otra cosa, pero por favor, no llame al señor Stebenson, seria mi fin.
_ De acuerdo, pero usted debe decirme que trama con todo lujo de detalles_ respondió ella contenta de haber conseguido su objetivo tan fácilmente.
_ ¿Nos vamos ya, mi señora? _recito Dan con mucha palabrería.
_ Señorita. Pero, ¿adonde vamos? _pregunto desconcertada.
_ Pues a mi casa, allí se lo contare todo y si es preciso me ayudara a conseguir mi objetivo, me puede venir bien un aliado de la nobleza_ dijo él.
Antes de dejar la casa la señorita fue a presentarle sus excusas a su anfitriona, la señora Stebenson, diciéndole que tenia un asunto en la ciudad y que debía partir de inmediato. Esta noticia sobresaltó a la señora de John Stebenson, pero la dejo marchar con la promesa de que esta acción les daría mucho de que hablar por la tarde. Los chismes son los chismes.
§
Daniel, cuyos padres eran burgueses más o menos bien avenidos, vivía en una bonita casa no muy cerca del centro de la ciudad con su familial ya que el no se había casado. Entraron por la puerta de atrás para que no les viera nadie, ya que los nobles eran los grandes enemigos de los burgueses y entre ellos disputaban una guerra clasista de lo más absurda, al menos para Daniel. Aunque seria faltar a la verdad no decir que el propio Daniel los encontraba estirados y mandones. Pero ahora estaba en su habitación privada con una dama de la nobleza a la que no conocía de nada... _menudo día _pensó Dan pesaroso.
_¿Cómo se llama? _ Pregunto Daniel a su “invitada”.
_Me llamo Marianne Bliss _respondió ella obediente.
_Bien, el mío es Daniel Brandon, y no puedo decir que sea un placer ya que me ha metido usted en un aprieto. Ya que si la dejo marchar le contara a sus allegados lo que ha pasado. Pero si le dejo que se quede debe serme útil y ayudarme en mi cometido. ¿Estaría dispuesta a eso? _Pregunto Daniel.
_ La verdad es que, señor Brandon, creo que me quedare con usted. Aunque parezca que no soy una mujer aventurera a la que le gusta poner un poco de color en su vida. Tanto decoro me aburre ¿sabe? Pero cuenteme de una vez su plan, ¡me muero de curiosidad¡
Después de que Daniel se lo explicase todo a Marianne esta se mostró mas que conforme con su plan y prometió ayudarle en lo que pudiera.
Dan, con todo este alboroto se había olvidado del libro que había cogido del despacho del señor Stebenson. Se metió la mano en el bolsillo, lo saco y se lo mostró a Marianne. Lo abrió rápidamente y encontró, lo que hace un rato había visto, tres cartas. El y Marianne las leyeron y se quedaron perplejos con su contenido.
Así decía la primera carta que había sido depositada en el libro:

Señor john Stebenson:

Hemos encontrado un texto escrito por un ciudadano de su cúpula, data de hace unos meses, lea y juzgue por si mismo.
Estimados lectores:
Es inminente, pronto todas las cúpulas serán cerradas y seremos encerrados en ellas. La gente grita, dominada por el caos de esta situación...
Creo que cuando esto acabe ya nadie recordara...

Esta claro, esto supone una amenaza al sistema, debemos callar estas voces. Es mejor vivir en la ignorancia. Haga desaparecer a ese hombre.
Fdo.: cúpula superior nº104 20/6/3127



La carta les fue muy confusa y no entendieron casi nada de su contenido. Eso si tras leerla se le plantearon numerosas preguntas. ¿ La carta daba pie a entender que habían más cúpulas? ¿Había habido mas gente que como él quisiera salir de aquí?
Las dos cartas siguientes, aunque muy cortas, aclararon sus preguntas.

Señor john Stebenson:
Me alegra saber que ha puesto fin a ese intento de rebelión dentro de su sistema. Solo espero que no se vuelva a producir ningún intento de salir de la cúpula de ahora en adelante.
Cúpula superior nº104 12/10/3130


Señor john Stebenson:
He sabido que ha sido benévolo con su prisionero. No debe serlo, ese hombre merece su castigo por sus palabras. Vigile que no se forme una nueva resistencia... hay indicios de que una sé esta fraguando. Acudiré al baile que dará la semana que viene y por favor no me escriba preguntándome como sé estos pormenores ya que usted sabe que lo sé todo sobre usted.

Estas tres cartas fueron de gran importancia para Daniel, ya que le confirmaban la existencia de otros compañeros que como él, habían intentado escapar de esta sociedad. El y Marianne planearon volver a la mansión el día del baile, puesto que la señorita Bliss seria invitada y podría llevar a un acompañante. Una vez dentro deberían investigar y buscar a la misteriosa persona que escribía las cartas; o si esto no resultaba investigar por su cuenta.
§
Llego el día del baile y Daniel, nervioso, esperaba que la velada concluyera tal y como habían planeado una semana antes. Marianne llegó con poco de retraso, pero Daniel pensó que esos minutos habían valido la pena ya que ella lucia radiante, cosa que el no sabia si se convertiría en ventaja o desventaja.
La finca estaba llena hasta los topes de la alta nobleza y burguesía_ cosa que sorprendió sobremanera a Dan, ya que pensaba que iba a ser el único de su clase en el evento. En cuanto pudieron él y la señorita Bliss se escabulleron lejos de los demás invitados y empezaron sus indagaciones, ya que les había resultado imposible encontrar al hombre de las cartas. Lo primero que hicieron según el plan fue volver a poner el libro en el estudio, para no levantar sospechas. Empezaron a buscar pasadizos secretos en la casa, ya que era la única manera de poder esconder a alguien entre estas chismosas paredes. Tras un par de horas de búsqueda se dieron por vencidos y se sentaron en el sofá para calentarse un poco con el fuego crepitante de la chimenea.
_¿Y ahora que, señor Brandon? _ dijo Marianne un poco desanimada.
_ no lo sé _dijo Daniel acercándose al fuego _ necesitamos algo de suerte, nada mas...
De repente, en esa misma estancia vacía de gente excepto ellos dos se abrió una puerta oculta, que Dan había abierto al girar una figura de bronce situada cerca del fuego. Sin pensarlo dos veces se adentraron en el oscuro pasadizo, no sin antes llevarse una rama ardiendo para iluminarles el camino. Pronto empezaron a vislumbrar algo en la distancia, cuando llegaron allí se dieron cuenta de que la luz emanaba de una vela que alumbraba a un hombre, ya anciano, escribiendo.
¿Quien se acerca? dijo la voz temblorosa del anciano, ya que por mucho que quisiera ya no podía ver, tantos años recluido en la casi absoluta oscuridad le habían dejado ciego.
No se preocupe, venimos a ayudarle dijo Daniel_ queremos descubrir como salir de esta ciudad cúpula y descubrir la verdad sobre nuestra existencia.
_bonitas palabras chico, pero yo no te puedo contar nada, además ya estoy demasiado viejo para todo…
_usted es el hombre de la carta…al que mandaron desaparecer…_dijo Marianne.
_De acuerdo, ya veo que sabes de mi existencia… en ese caso os mostrare algo que solo se puede ver a la luz de mi vela_dijo el anciano ya mas relajado.
En efecto el anciano apuntó a la pared con la luz y se descubrió un dibujo. Era un círculo muy grande, compuesto a su vez por cirulos más pequeños. He aquí la estructura de ese universo de cúpulas. Si queridos lo que estáis viendo es una reproducción de nuestro mundo desde arriba. Además cada cúpula tiene dentro su propia ciudad y así sucesivamente…es un ciclo infinito…
pero…¿hay alguna manera de intentar destruir las cúpulas? pregunto Daniel
_¿estas seguro de intentar eso chico? Piensa que no es seguro que allí fuera encuentres algo… yo ni siquiera recuerdo…pero a pesar de esto te diré como intentar destruir las cúpulas…debes hablar con los del otro mundo, con gente de otra cúpula y convencerles de que te sigan, diles la verdad, que los liberaras de su opresión dentro de la cúpula si te ayudan. Lo único que tienes que hacer es establecer contacto visual con uno de ellos y poner las manos sobre donde este la suya. Entonces surgirá como de la nada una pequeña bola dorada, todo lo que tienes que hacer es colocar esa bola bajo tierra y esperar a que se realice el cambio, la explosión y el nuevo comienzo.

Daniel subió a una de las cúpulas más grandes de la ciudad e intento ver dentro, pero no logro ver nada más que una pequeña parte interior del edificio. Esta vez solo apoyo la mano frente al cristal y llamo con la mente, solicito ayuda y consejo.

De pronto, frente a el apareció un ser un poco mas pequeño que el y con una indumentaria muy extraña. Dan le conto lo que quería hacer y el accedió enseguida a ayudarle.
Ambos coloraron sus manos en su parte de cristal, Daniel sintió como si una ola de viento fresco se recorriera todo su cuerpo y de pronto se sintió volar. Todo ceso rápidamente pero al volver a mirarse la mano tenia dentro de ella una bola dorada…la enterraron en el centro de la ciudad y esperaron.

De repente el cristal que los rodeaba empezó a resquebrajarse, pronto estallaría en pedazos…había comenzado la destrucción, la explosión, el nuevo comienzo.

Todas y cada una de las cúpulas estallaron juntas en un espectáculo visual bellísimo Por fin el punto, que se forma gracias a otros tantos , se convirtió en línea.

§
Solo se alcanzaban a ver unas pocas ciudades flotando debido al polvo que había levantado la explosión, es curioso pensar que aunque las cúpulas hallan desaparecido las ciudades siguen en pie…pero no volveré, al menos no por ahora. Es tiempo de cambiar.
















2 comentarios:

hola! dime dime